BBN Radio
Cómo Ir Al CieloRadioInstituto BíblicoChatRecursosIdiomasDonacionesContáctenos
Inscribirse|Acceso a los Cursos|Ayudas a sus Preguntas|BI Ayuda de Audio|Quienes somos|Herramientas|Testimonios|
Datos de ingreso
Entrada del estudiante
nombre del usuario:
Contraseña p/este sitio:


¿olvidó su contraseña?
¿olvidó su usuario?
No es un estudiante aún
La Sumisión de la Mujer - Estudios de Vida y Hogar Cristiano


Motivaciones para la Sumisión
Textos: (Mt. 7:21; 10:37) y (2 Co. 5:15)

A. Vea la Sumisión como la prueba que genuinamente eres cristiana.
1. Entendemos que la verdadera iglesia se somete a Cristo así como una verdadera esposa se somete a su marido. No importa la prueba que pueda padecer un creyente, nunca será justificado que por esto no se someta a Cristo.
2. El verdadero cristiano estará dispuesto a someterse a Cristo y a no ser rebelde a sus demandas aunque pase por diversas pruebas. Él sabe que desobedecer a Cristo es un acto de rebeldía como sería un acto de rebeldía el que una esposa no se someta a su marido.
3. Jesús declaró en Mateo 7:21:“No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos”. Aplicando esto a nuestro tema debemos decir, que la voluntad de Dios para la esposa es la sumisión al marido. Aquella esposa que no está sujeta a su marido refleja hipocresía espiritual delante de Dios.
4. Por tanto, toda esposa que con la ayuda de Dios se someta a su esposo, alegre y complacida, no importando las dificultades del carácter, temperamento o acciones de su marido, sepa que se mostrará a sí misma que ha nacido de Dios y tendrá las bendiciones de Dios. Dios le cuidará y le seguirá dando las fuerzas para obtener la victoria, porque usted ha demostrado ser su hija.

B. Vea la Sumisión como un Instrumento de su Santificación.

1. Debemos saber que el llamado principal del evangelio es un llamado para auto negación, es un llamado, según nuestro Señor Jesucristo a perder nuestras vidas por causa de Él. Recordemos las palabras de Jesús cuando dijo en Mateo 10:37 - “El que ama a padre o madre más que a mi, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; y el que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mí. El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará”.
2. Hermana en Cristo, lo que el Señor está diciendo aquí es que cuando usted pierda su vida por estar sujeta a su marido, la está perdiendo por causa del mismo Señor Jesucristo, por tanto entienda que usted hallará su vida en el día del Señor. No permitan que sus deseos y sus pensamientos sean el centro de sus caminos, sino entiendan que el centro de su vida y de su voluntad es Cristo Jesús y sus demandas.
3. El apóstol Pablo dice en 2 Corintios 5:15 dice que Cristo murió para que los que viven para sí, ya no vivan para sí mismos, sino que vivan para aquel que murió y resucitó por ellos. Hermana en Cristo, sepa que Cristo murió para que ya tú no vivas para ti, sino para que vivas para él. Si te preguntas ¿Cómo vivo para Él? Comienza sometiéndote a tu marido de una manera alegre y dulce y de esta manera vivirás para Cristo. Realmente el que se te pida que te sometas a tu marido, será poco en comparación con lo que Cristo hizo en la cruz del Calvario para salvarte. Cuando pienses que Cristo sufrió tu infierno por ti entonces será una bendición para ti someterte a tu marido.

C. Vea la Sumisión como un Instrumento para la Salvación de su esposo.

1. Como podemos analizar al final del texto: “…para que también los que no creen a la palabra, sean ganados sin palabra por la conducta de sus esposas”. El apóstol Pedro nos está declarando que la sumisión es evidentemente, un instrumento de Dios puesto por él, en las manos de las esposas creyentes, para operar en la salvación de los esposos incrédulos.
2. Está claro que para creer esto debemos tener fe. Muchas son las esposas que entienden que Dios no cumple sus promesas, pues ellas dicen que hacen todo lo que Dios demanda y Dios no les responde de acuerdo a esta promesa. Aquí debemos hacernos una pregunta: ¿Cuando estas esposas dicen esto, verdaderamente están haciendo todo lo que Dios les pide? Creo que toda esposa en esta situación debe revisar su conducta antes de juzgar a Dios. Recuerde que si alguien es infiel somos nosotros y no Dios (2 Ti. 2:11-13).
3. Además debemos de pensar sobre la manera absoluta en que Dios reclama aquí que las esposas no deben tratar de convencer a sus esposos por medio de las palabras, sino por medio del testimonio de una conducta que veremos en los siguientes versículos. Esté clara, de que lo que Dios usará para que su marido se convierta no es su predicación, sino su conducta pura ante Dios y no a su parecer.

CONCLUSIÓN Y APLICACIÓN:
En conclusión, podemos llevar un punto importante de aplicación personal:
Esposas cristianas, amadas hermanas, las demandas del Señor son difíciles, solamente las podrán lograr con su ayuda y su poder.
Antes de concluir queremos también hablar a las conciencias de los esposos, que han sido constreñidos en sus corazones al ver estas difíciles demandas para sus esposas, para que oremos con el propósito de que Dios ayude a nuestras esposas a cumplir con su gran comisión.

Para mejorar en su sumisión y vida matrimonial, le invitamos a estudiar los siguientes cursos: Hogar Cristiano I y II, El Patrón Bíblico para el Matrimonio, El Placer del Matrimonio Cristiano, La Comunicación en el Matrimonio, estos cursos están disponibles en el Ciclo de Estudios de Vida y Hogar Cristiano.


Escrito por:   Pastor José Mallen    Fecha de publicación  11/14/2011 3:30 PM
Número de visitantes  7460


Login                                                                                           Herramientas bíblicas   Derechos de autor   Privacidad