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EL NACIMIENTO DE CRISTO NOS RECUERDA QUE SU TIEMPO ES PERFECTO
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Muchas veces en la vida podemos llegar a pensar que Dios esta tarde, porque no responde a nuestras peticiones, la verdad es que Dios nunca está tarde. A lo largo de las Escrituras leemos acerca de las personas que se impacientan con el tiempo de Dios. Los israelitas esperaron y esperaron al Mesías prometido y algunos perdieron la esperanza. Pero Simeón y Anna no lo hicieron. Estaban en el templo diariamente orando y esperando (Lucas 2: 25–26, 37). Y su fe fue recompensada. Llegaron a ver al niño Jesús cuando María y José lo llevaron a ser dedicado (vv. 27-32, 38).
Cuando nos desanimamos porque Dios no responde de acuerdo con nuestro horario, el nacimiento de Cristo nos recuerda que "pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley,para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos.”(Gálatas 4: 4–5).
El tiempo de Dios siempre es perfecto, y vale la pena esperar. Aprendamos a esperar pacientemente en El.
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Escrito por:
Escritores de Nuestro Pan Diario
Fecha de publicación
12/20/2019 8:58 AM
Número de visitantes
2837
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